Aurora
tenía diez años de casada. Su esposo en un principio fue bueno con
ella y con los tres hijos de la unión. Pero hacía seis meses
desatendía el hogar, por estar en relaciones amorosas con otra
mujer. Cuando me visitó desconsolada me pidió que la ayudara. Le
dije que la orientaría, por cuanto su marido debía cumplir con su
deber para con sus hijos, pero que su caso era difícil y sólo su fe
y persistencia lograrían la solución. Le dijo que no odiara a
su esposo por lo que hacía ni tuviera resentimientos para la ¨otra¨.
Sino que los perdonara y les deseara que se arrepintieran para que no
acumularan castigo por sus errores.
Ella persistía con fe y cada vez que me visitaba me decía que su
confianza crecía aunque no veía el resultado hasta entonces. Un
año después vio llegar a su esposo arrepentido y pidiéndole
perdón. Aurora es feliz en su hogar, debido a que persistió en
desarrollar sus poderes psíquicos para triunfar.
EL
AMOR, LA FELICIDAD Y LA SATISFACCIÓN SON EL RESULTADO DE LOS
ESFUERZOS REALIZADOS PARA AGRADARSE Y COMPRENDERSE MUTUAMENTE.
JOSÉ
FARID H.
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